La publicidad online es actualmente un elemento esencial para cualquier estrategia de marketing que pretenda tener éxito: receptiva, versátil, capaz tanto de desarrollar una percepción y un compromiso de marca como de dirigir la respuesta y el comportamiento del consumidor en la compra. Teniendo en cuenta los beneficios firmemente establecidos de la publicidad online no debería sorprendernos que el 15% de los presupuestos publicitarios en todo el mundo* actualmente se gasten de este modo. De hecho, más bien deberíamos preguntarnos qué cuantía del 85% restante podría emplearse mejor en el mundo digital.
La publicidad online se considera con frecuencia la mejor estrategia de respuesta directa que se ha inventado. Y lo es. Pero esto es solo una parte de la historia. Las campañas de publicidad en Internet son capaces de captar a consumidores en cualquier fase del embudo de compra con un nivel de interactividad que los consumidores actuales demandan pero que no puede ofrecer ningún otro canal. La publicidad online puede crear niveles nuevos de defensa de y compromiso con las marcas, generar de manera casi inmediata el boca en boca, captar al público objetivo hasta un punto que no es factible a través de otros medios y tener un impacto inmediato en el comportamiento de compra. El mundo digital ha cambiado con rapidez el modo en que los consumidores se relacionan con las marcas. Para que los anunciantes puedan responder, posiblemente necesiten ver más allá de la pregunta “¿Por qué digital?” y comenzar a preguntarse “¿Cómo digital?”. Muchas de las campañas de marketing integral de más éxito hoy en día han conseguido tener impacto al desarrollar desde el principio sus estrategias en torno al potencial del mundo digital.
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